• El puro no •
¿Qué será lo que esconden tus besos? ahí donde habitan tus recuerdos tu miedo que es mío y de nadie. Árbol de raíces anidadas, tierra de ti. ¿En dónde acomodo mi llanto cansado? en tus cajas empolvadas de pasado en las noches cuando nos deseamos; savia de tus ojos que guardo ávidamente. No me des promesas insufribles, etéreas, no quiero siquiera palabras como rosas: delicadas y suaves, como hojas de cristal; débiles pero hermosas. Yo no quiero eso. Pájaros muertos como sones sin son yo no quiero el puro no, sin lamentos, noches pardas de cuervos sin larvas. Trozos de ensueño, moralidad y sosiego. Todo solo, el puro no de frases gastadas papiros amarillos posados en tus piernas letras moribundas, disipadas, gangrenosas; usurpadas por demonios diligentes, falsos. ¿De dónde sacaré latidos para resistir? la delicia de saberte mío sin mi y sin ti devorarte cada centímetro, saciarme; de conteneos como péndulos perfectos. Yo no quiero ofrendas resplan